Alemania - Dia 4 - Füssen – Castillos Neuschwanstein y Linderhof

Hoy es el día en el que nos dirigimos hacia el sur, hacia Füssen,
para visitar los castillos de Neuschwanstein y Linderhof.

Para desayunar, repetimos de nuevo en la cafetería situada
en frente del hotel, en la esquina de Schillerstraße con
Schwanthalerstraße. Hoy nos sale el desayuno por 4,30€ por
persona.

Por si acaso, decidimos comprar unos bocadillos en la estación
para la hora de la comida, ya que habíamos leído en algunos
foros que las colas en la zona de los Castillos son enormes.
Dos bocatas por 7,80€ y tan ricamente.

Para llegar a Füssen, tomaremos el tren que une Munich con Füssen.
El tren de Munich a Füssen tarda 2 horas. La opción más barata es
comprar el Bayern Ticket, válido para hasta 5 personas, y cuesta 26€.

http://www.bahnland-bayern.de/bahnland-tickets/bayern-ticket
http://www.bahn.de/i/view/ESP/es/prices/germany/bayernticket.shtml

Solo es válido entre semana, desde las 09:00 a.m. a 03:00 a.m. del
día siguiente. Este ticket incluye también el acceso a los autobuses
que parten desde la estación de Füssen al Ticket Center de los
Castillos. Este tipo de billetes de tren solo sirve para los
trenes regionales.


El primer tren que podemos coger para acogernos a la oferta es el
de las 09:51 AM. El tren sale a la hora prevista.
Los trenes alemanes no tienen aire acondicionado, y hoy ha salido
un día bastante caluroso. La única opción es bajar las ventanillas,
pero hemos tenido la mala suerte de viajar junto a una "frau"
alemana muy antipática que nos obliga a subir la ventanilla.
Para que ella vaya a gusto, le pide a todo el vagón que suba
las ventanillas, y todos muertos de calor para que la señora
esté contenta. Unas chicas chinas que iban sentadas al lado
de la "amable" frau, iban al borde de un golpe de calor, cuando
por fin, 30 minutos antes de llegar a Füssen, la mujer más odiada
del tren, por fin se baja. Y todos los pasajeros, nos levantamos
inmediatamente y bajamos las ventanillas hasta abajo.
Quizás por el cabreo y el calor, no habíamos sido capaces de
disfrutar del maravilloso paisaje que nos muestra el trayecto
del tren, que atraviesa multitud de valles:

Después de 2 horas de viaje, por fin llegamos a la estación de Füssen.
Para llegar hasta los castillos, tenemos que coger el autobús  
RVA/OVG 73  en dirección a Steingaden / Garmisch-Partenkirchen,
hasta la parada Hohenschwangau Neuschwanstein Castles o el bus
RVA/OVG 78 en dirección a Schwangau hasta la parada
Hohenschwangau / Alpseestraße. Para más información consultar
http://www.rvo-bus.de
La Bayern Ticket permite utilizar estos autobuses sin coste adicional.

Durante el trayecto del autobús ( unos 10 minutos ), se nota que
Füssen es un pueblo superturístico.

El autobús finaliza su trayecto en la zona de parking del recinto, y
desde ahí tenemos que caminar hasta el ticket center, para recoger
nuestras entradas. Debido a las colas que se forman, yo recomendaría
a todos que reserveis vuestras entradas por internet, ya que existe
una fila específica para estas reservas. En nuestro caso, nos habíamos
decidido por el King’s Ticket. Este billete cuesta 23€ y permite visitar
los castillos Hohenschwangau y Neuschwanstein. Al comprar el King's
Ticket primero se visita obligatoriamente Hohenschwangau y luego
Neuschwanstein. ( Más información en https://www.hohenschwangau.de/430.html ).

Cada visita guiada dura aproximadamente 35 minutos. A si que habrá
que tenerlo en cuenta en la solicitud de las entradas.

Una vez recogidas las entradas, comenzamos el camino a pie hacia
Hohenschwangau.

Las primeras casitas que encontramos en el camino tienen mucho encanto.

Son unos 30 minutos de caminata, pero las vistas del lago Alpsee merecen la pena.

A este castillo también puede acceder mediante coche de caballos.

Al llegar a la entrada al castillo, aprovechamos para descansar y
tomarnos nuestros bocatas.

Al recibir nuestras entradas, tenemos marcada una hora de entrada
al castillo. Mientras llega la hora, visitamos los jardines de este castillo.

Durante la visita al interior, un guia nos acampaña por las diferentes
salas. Para la explicación de cada una de ella, contamos con una
audioguía ( ya incluida en el precio de la entrada ). No se permite hacer
fotografías en el interior de los castillos.

Una vez terminada nuestra visita a Hohenschwangau, nos ponemos
en camino hacia Neuschwanstein. Si elegís hacer el camino a pie, tened
en cuenta que es una caminata de unos 45 minutos y que todo el
camino es cuesta arriba. Si no queréis hacer el camino a pie, tenéis
la opción de subir en un minibus o en coche de caballos ( los precios
son diferentes para la subida y la bajada ).

Durante el camino, hay varios miradores desde donde se puede ver
el castillo de Hohenschwangau y el Alpsee

Las primeras vistas del castillo de Neuschwanstein son espectaculares.

Antes de que llegue la hora de nuestra entrada, nos damos una
carrera para llegar hasta el mirador de Marienbrücke, desde donde
observamos Neuschwanstein en todo su esplendor. Este mirador
siempre esta abarrotado de gente, a si que es un poco agobiante
poder hacer una foto. Yo recomiendo atravesar el puente ya que
al final del mismo hay más espacio, y la vista del castillo es igual
de buena.

Una vez hemos hecho la foto de rigor, nos volvemos corriendo
hacia el castillo para visitar su interior. Antes de llegar a las salas,
podemos contemplar la belleza del patio del castillo.

Al igual que en Hohenschwangau, en Neuschwanstein un guía
nos acompaña a través de las salas, y con nuestra audioguía
recibimos información de las mismas. Aquí tampoco esta permitido
hacer fotografías.

Después de visitar ambos castillos, comenzamos el descenso
del camino, que ahora se hace bastante mas llevadero. Para elegir el
tren de vuelta, es importante darse cuenta que hay trenes directos
de Füssen y trenes con escalas. En nuestro caso queríamos coger
el tren directo de las 18h, a si que cuando llegamos a la zona del lago,
calculamos que teníamos tiempo para darnos un rápido chapuzón.

Después de las caminatas, y con el calor que hacía, agradecimos un
montón el baño, a pesar de que la temperatura del agua es bastante
fría. Nos encontramos a varios grupos de españoles haciendo lo
mismo, je,je.. Si vais en verano, echad siempre el bañador en la
mochila por si os da tiempo a un baño rápido.

Nos secamos a toda prisa, y corremos para coger el autobús hacia la
estación.

Nuestro tren llega a la estación puntual y se llena rápidamente, ya que
el siguiente tren sale una hora mas tarde y además no es un tren
directo a Munich.

El camino de vuelta se hace un poco largo y nos quedamos dormidos.

Llegamos a Munich sobre las 20:15, y buscamos algún sitio para
cenar que esté cerquita del hotel, ya que estamos rotos. Nos decimos
por el Millennium SHISHA PALAST ( Schwanthalerstr. 12 -
http://www.cafe-millennium.de ). Los platos son abundantes y el
local tiene muy buen ambiente. Además hay terraza. Considerando
que nos tomamos unos vinos y cervecitas junto con la cena, no
estuvo mal de precio ( 40€ dos personas ).

Después de una bien merecida cena nos marchamos a descansar tras
una dura jornada.

A pesar de que el viaje en tren se haga un poco pesado, yo creo que
la visita a los castillos es una excursión obligatoria si estás alojado
en Munich o en Salzburgo.